Tener un auto es algo que te cambia la vida. La principal ventaja radica en la independencia que logras al trasladarte a dónde tu quieras en el momento que quieras. Si bien algunos lo ven como una inversión, otras personas podrían considerarlo un gasto. Pero no te preocupes. En la entrada de hoy te damos algunos consejos para ahorrar dinero y reducir los gastos de tu auto.
Gasolina
Si bien el costo de la gasolina ha aumentado considerablemente en los últimos años y es algo que no podemos cambiar, sí que podemos gestionar mejor el uso de ella.
Recuerda que tu vehículo puede soportar cierta carga (generalmente lo indica el fabricante en los manuales de usuario); si aumentas el peso que puede soportar, lo más probable es que comience a gastar más gasolina. Así que trata de cargar sólo el peso que indica el fabricante para conservar un óptimo rendimiento de combustible.
Además procura mantener una velocidad adecuada y constante al conducir. Frenar y acelerar de forma brusca no solo hará que tu auto gaste más gasolina, también puede dañar otros componentes del auto a largo plazo. Procura tener rutas fijas para moverte de la casa al trabajo y viceversa, esto hará que des vueltas innecesarias, llegarás más rápido a tu destino y por consiguiente, ahorrarás gasolina.
Si conduces adecuadamente y además te fijas una ruta constante puedes calcular lo que gastas en gasolina en una semana o en un mes. Esto puede ayudarte a mantener un presupuesto fijo dentro de tus gastos para que cargar gasolina no se convierta en un apuro.
Como consejo extra revisa la presión en las llantas. Si la presión de aire está por encima o por debajo de lo indicado por el fabricante, lo más probable es que el motor se vea forzado a gastar más combustible de lo normal para funcionar de forma correcta.
Servicio y mantenimiento
Acostúmbrate a realizar un mantenimiento preventivo de tu auto regularmente. El distribuidor puede recomendarte el intervalo de tiempo adecuado para realizarlos. Recuerda que tu auto como cualquier máquina necesita mantenimiento para trabajar de forma adecuada. Además, estos mantenimientos te ayudan a encontrar problemas a tiempo y evitar un accidente.
Si estás pensando en el costo de que solo “revisen” tu auto, pon en perspectiva lo que podrías gastar si se te queda parado el auto y tienes que remolcar, si tienes un accidente y necesitas reparaciones mayores, compra de refacciones, etc.
Un punto que parece insignificante pero que también es muy importante tener en cuenta es el de verificar el estado del aceite en el motor. El aceite es un elemento indispensable en el funcionamiento del motor de tu auto; no esperes a que se quede sin él. El cambio de aceite y anticongelante son dos cosas que puedes hacerlas tú mismo sin mayor problema, así que en este punto es ahorro al doble.
En cuestión del servicio siempre será recomendable llevarlo al distribuidor que le corresponda según la marca. Al final de cuentas, los técnicos de servicio dentro de las agencias están certificados y conocen a detalle cómo funcionan los vehículos de esa marca. Por cuestiones de seguridad siempre se aseguran de que las refacciones que se reemplaza sean las originales y todo el proceso de servicio se sigue bajo ciertos lineamientos de calidad.
Y en el caso de seminuevos puede que aún esté disponible la garantía de servicio, así que ¡aprovéchala!
Si llevas tu auto al taller mecánico de la esquina puedes ahorrarte unos cuantos pesos pero nada te asegura que tu auto quede al 100% y lo más probable es que pierdas tu garantía.
Así que ya lo sabes. Ahorrar cuidando tu auto es muy sencillo. En Seminuevos Farrera siempre buscamos cuidar tu bolsillo ofreciéndote los mejores consejos y los mejores autos.
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